DEL MAR A LA MONTAÑA SIN PERDER DE VISTA EL AZUL

Ayer de compras, como dijo mi hermana:  día de chicas. Tres generaciones.La abuela, la madre, las niñas, la tía.

La tela, tétrica para el gusto de las mayores, la eligió la modelo. Imagino que le gustó ese azul turquesa,  color que nos regala la vista al mar y lo que anímicamente nos aporta: calma, tranquilidad y claridad mental.  Cualidades las dos primeras que carece la niña :) :) :) y será por eso que le ayudarán a equilibrar y compensar para reforzar esa mente tan clara. ;)

Compramos tela para poder cuadrar los dibujos del estampado y se ha quedado un dobladillo de 25cm. Ya puede seguir creciendo con la seguridad que la falda podrá crecer con ella.

El pespunte, negro por el exterior y Azul claro por el interior. Perfecto para cuando toque descoser y rehacer el dobladillo.

Tiene las aberturas en los laterales. Y hemos colocado, en la parte delantera , una cinta ancha de goma para que le ayude a mantenerla en su cintura.

En la parte de detrás hemos cosido dos tiras con ojales y botones para que ella misma se la termine de colocar y ceñir por delante.

Y compramos otra tela de algodón para hacerle la parte superior pero como no nos da tiempo y necesitábamos envolver la falda para transportarla, bien nos ha valido para hacerle la funda protectora. Dos pespuntes rápidos hasta que decidamos qué y cómo será lo que hagamos con ella.

Y mañana, rápido, haremos una camiseta de punto lycra también azul turquesa para terminar de vestirla. 

El resto del vestuario: calcetines, zapatos, mantón, delantal y tocado ya los tiene de otras ocasiones.

Y a continuación, la camiseta que irá debajo del mantón que todo lo tapa.

Que lo disfrute.